El fundador y vocero de #NiunRepartidorMenos, Saúl Gómez indicó que crearon un decálogo para concientizar a la población sobre la importancia del rol que cubren los repartidores, ya que la tasa de mortalidad ha crecido 500% tan sólo en la Ciudad de México. El Colectivo de trabajadores digitales #NiunRepartidorMenos, realizó una gira por Monterrey para presentar el decálogo
El fundador y vocero de #NiunRepartidorMenos, Saúl Gómez indicó que crearon un decálogo para concientizar a la población sobre la importancia del rol que cubren los repartidores, ya que la tasa de mortalidad ha crecido 500% tan sólo en la Ciudad de México.
El Colectivo de trabajadores digitales #NiunRepartidorMenos, realizó una gira por Monterrey para presentar el decálogo con el que buscan concientizar a la población sobre la importancia del rol que cubren, y de la urgencia de que se legisle sobre la seguridad social de estos trabajadores, cuya tasa de mortalidad ha crecido 500%, tan sólo en la Ciudad de México, comentó a El Economista, Saúl Gómez, fundador y vocero de la organización.
“Hay dos puntos que son decisiones legislativas, la protección social se tiene que legislar y construir, porque no podemos estar buscando beneficios; desde esta perspectiva confiamos que este decálogo va a beneficiar a todas las personas que estén en plataformas digitales», señaló.
«Pago digno. Se busca que las plataformas paguen (una comisión) dignificante, aquí en Monterrey el clima es muy extremo, que se le pague mejor a quienes reparten en moto o en bicicleta”.
Explicó que junto con la organización Nosotros y el Doctor Manuel Sánchez Muñoz, presentaron el decálogo que profundiza sobre mejorar las condiciones laborales de las personas que participan, con una definición de plataforma y trabajador; ofrecer un trato digno.
Recalcó que la atención a los casos de violencia de género son prioritarios: “Tenemos que hablar de las mujeres, porque la delincuencia las elige a ellas, también hay usuarios que cuando ven a mujeres repartidoras atentan contra la dignidad, o intentan forzarlas para que entren a las casas, por ejemplo, una compañera estuvo secuestrada siete días en Polanco”.
Ahondó que en Monterrey y en otras ciudades, las mujeres repartidoras son víctimas de intimidación, intento de violación y acoso.
Por ello, “se construyen protocolos de género para proteger a los y las repartidoras: Rappi tiene un botón en caso de peligro; DiDi tiene una línea especializada en cuestiones de género y Ubereats, ofrece atención a violencia, cuando se reparte o se conduce, incluso si al término de su jornada es víctima de violencia intrafamiliar en su casa, hay una protección de género, en alianza con Fundación Origen, quien les ofrece atención psicológica y jurídica”.
Otro de los puntos del decálogo es la Protección de la plataforma y la vigencia del seguro, que depende de cada aplicación. En algunas plataformas abarca hasta 30 minutos después del servicio, mientras que en Diddi cubre hasta 24 horas después, siempre y cuando se tenga un pedido, si no hay pedido no aplica.
Economía colaborativa. Esto significa que una persona se pueda conectar para colaborar, “es un principio que defenderemos”.
También piden que haya Transparencia, pues algunos de los trabajadores son desactivados, por supuestamente violar términos y condiciones, en esos casos el repartidor envía su versión de los hechos. En Protocolo Uber Réplica, permite envíar la situación que se vivió.
Seguridad Vial
#NiunRepartidorMenos surgió en noviembre de 2018, de entonces a la fecha se estima que han fallecido 593 en todo el país, de esta cifra 283 han ocurrido en la Ciudad de México y de este número 11 fueron asesinados por intento de asalto, sin embargo, dijo que hay una cifra negra, porque muchas veces no se denuncia.
El seguro por muerte accidental funciona siempre y cuando el repartidor tuviera un pedido en ese momento.
Saúl Gómez recalcó que actualmente los trabajadores están en ese entorno de peligro, y sin seguridad social, por eso se construyó el decálogo, en el cual también se involucraron las plataformas de delivery, debido a que los repartidores necesitan a las plataformas para generar ingresos y viceversa, “queremos que en ese intercambio, construyamos algo que con o sin regulación pueda aplicar, y que beneficie a todos los que están en el trabajo digital.
Otro de los puntos que se plantean en el decálogo es el crecimiento profesional de los repartidores, mediante cursos de idiomas o pueden cursar la preparatoria y tener alianzas para adquirir una moto a un precio razonable.
La gira va a continuar por otras ciudades como Querétaro, Puebla, Mérida, y Cancún. En el camino “estamos buscando a la academia si están interesados en dialogar con nosotros”, afirmó.
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