Una plaga de mosquitos conocidos como jejenes ha desatado la preocupación entre los habitantes del Área Metropolitana de Monterrey, quienes reportan picaduras y lesiones

La reciente aparición masiva de mosquitos en distintas áreas de Nuevo León ha generado alarma entre la población, con numerosos ciudadanos reportando picaduras y molestias. A través de las redes sociales, se ha desatado una ola de preguntas sobre el origen y la naturaleza de estos insectos, cuya presencia se ha vuelto difícil de ignorar en varios municipios de la región.

Mediante la aplicación de «Facebook», la usuaria Joana Franco compartió un post en la que subió un par de fotos, de sus pies con ronchas por las picaduras del mosquito.

Los afectados describen a estos mosquitos como diminutos y casi invisibles, lo que dificulta su detección hasta que comienzan a sufrir las consecuencias de sus picaduras. Las redes sociales se han convertido en un espacio para compartir experiencias y buscar soluciones ante esta nueva amenaza.

Los insectos, que actualmente infestan la zona metropolitana de Monterrey, son conocidos como jejenes.

Estas diminutas moscas, parientes cercanos de las moscas comunes y los mosquitos, tienen una presencia habitual en entornos boscosos y áreas con alta humedad, como arroyos y zonas urbanas próximas a cuerpos de agua.

Su proliferación se intensifica en épocas cálidas del año, particularmente en primavera, verano y otoño.

Se transmite mediante picaduras de la misma clase de mosquitos que pueden propagar otras enfermedades tropicales, como el dengue, el chikungunya y la fiebre amarilla.

A diferencia de otros mosquitos que pueden transmitir enfermedades como el dengue, los jejenes no suponen un riesgo significativo en términos de enfermedades transmitidas a los humanos. Aunque sus picaduras pueden resultar molestas e irritantes, especialmente para personas sensibles, no transmiten enfermedades como el dengue o el zika.

El biólogo Carlos Velazco aclara que los jejenes son parte natural del ecosistema y han estado presentes en la región desde hace mucho tiempo. Su presencia es común, sobre todo en las estaciones más cálidas del año.

Para evitar las picaduras de estos insectos, se recomienda el uso de repelente de insectos, especialmente en áreas con alta concentración de jejenes. Además, mantener limpios los recipientes que puedan acumular agua estancada ayuda a reducir su reproducción, ya que estos son sitios donde depositan sus larvas.

A pesar de ser una molestia para los humanos, es importante recordar que los jejenes cumplen una función importante en el ecosistema como parte de la cadena alimentaria, siendo alimento para aves, peces y otros insectos. Por lo tanto, aunque su presencia pueda ser incómoda, son una parte natural y necesaria del medio ambiente.